Las evaluaciones técnicas realizadas en los Bosques Urbanos Nativos (BUN) de Guayaquil confirman resultados positivos en la adaptación y crecimiento de especies vegetales nativas. Estos espacios demuestran un alto desempeño ecológico. La iniciativa se consolida como una alternativa sostenible frente al modelo tradicional de parques urbanos con plantas ornamentales introducidas.
Las inspecciones estuvieron a cargo del ingeniero forestal Nelson Jaramillo. Las actividades se desarrollaron en el marco del convenio entre la Fundación La Iguana y el Herbario de la Universidad Nacional de Loja. Durante las visitas se analizó la composición florística y el comportamiento ecológico de la vegetación.
Los resultados evidencian la replicación exitosa de distintos ecosistemas. Entre ellos se encuentran el bosque seco tropical, el matorral espinoso, el bosque piemontano y una recreación del bosque montano. Algunas especies, con apenas dos años de plantación, superan ya los cinco metros de altura.
Las evaluaciones también confirmaron la presencia de fauna asociada. Se registraron aves y otros organismos. Esto demuestra que los Bosques Urbanos Nativos funcionan como sistemas vivos. Estas interacciones fortalecen el equilibrio ecológico urbano.
Uno de los principales beneficios de las especies nativas es su adaptación natural al clima local. Este rasgo resulta clave durante la época seca. Además, en temporada invernal, los BUN favorecen la retención e infiltración del agua. También contribuyen a la regulación de la temperatura urbana.
La estructura por estratos, que incluye vegetación herbácea, arbustiva y arbórea, permite que estos espacios funcionen como corredores de biodiversidad. Esta configuración ayuda a reducir la proliferación de plagas urbanas. También promueve interacciones naturales entre insectos, aves y plantas.
Desde una perspectiva social y ambiental, se resalta la necesidad de un cambio cultural. La vegetación nativa debe ser valorada como parte del patrimonio natural del territorio. Los Bosques Urbanos Nativos ofrecen servicios ecosistémicos clave. Entre ellos están la captura de carbono y los beneficios para la calidad de vida ciudadana.
Como parte de la expansión de esta estrategia, la Fundación La Iguana y el Municipio de Guayaquil preparan un convenio de cooperación. El acuerdo permitirá implementar cuatro nuevos Bosques Urbanos Nativos. Estos se ubicarán en Sauces 7, Las Orquídeas, Batallón del Suburbio y la avenida Felipe Pezo. La iniciativa fortalecerá los corredores de biodiversidad y beneficiará directamente a las comunidades cercanas.






Fuente: M. I. Municipalidad de Guayaquil
