La innovación aplicada al motociclismo avanza a un ritmo acelerado y redefine la forma en que los conductores se protegen en carretera. Los cascos inteligentes, equipados con inteligencia artificial, realidad aumentada, visión ampliada y sistemas de detección temprana de riesgos, ya no son una proyección futurista: comienzan a posicionarse como el nuevo estándar de seguridad.
En 2025, diversas marcas del sector —como ICH, Shoei, Zyon y LIVALL— presentaron tecnologías que prometen transformar la experiencia de conducción, integrando funciones que antes solo estaban presentes en smartphones o en equipamiento militar especializado.
Tecnología que cambia la conducción
Visión ampliada y asistencia inteligente
Los cascos de nueva generación integran sistemas que fortalecen la percepción del entorno:
- Visión 360° con IA:
- Modelos como el iC-R de ICH incorporan cámaras externas y un sistema de inteligencia artificial que elimina puntos ciegos.
- El sistema proyecta una vista envolvente directamente sobre un visor frontal mediante tecnología HUD (Head-Up Display).
- Realidad aumentada (AR):
- Permite visualizar navegación, alertas, llamadas o velocidad en tiempo real sin desviar la mirada del camino.
- Reduce el riesgo de distracción y mejora la toma de decisiones en situaciones críticas.
- Grabación integrada:
- Algunos equipos, como el iC-R, incorporan cámaras frontales para registrar trayectos y generar evidencia visual en caso de incidentes.

Seguridad activa: prevención y reacción inmediata
Los avances no solo informan: también actúan.
- Alertas de colisión:
Detectan la proximidad de vehículos y advierten al conductor mediante luces LED o señales HUD. - Detección automática de accidentes:
En caso de caída o falta de respuesta del conductor, ciertos cascos envían notificaciones a servicios de emergencia o contactos previamente configurados. - Sistemas MIPS:
Capas internas diseñadas para reducir fuerzas rotacionales en el cráneo durante un impacto, mejorando la protección ante golpes laterales o giros bruscos.
Comodidad, salud y ergonomía
Las nuevas propuestas también incluyen soluciones de bienestar:
- Filtración de aire avanzada:
- La marca Zyon destaca por integrar filtros que atenúan la contaminación, el polvo y agentes que pueden afectar a personas con alergias.
- Estos modelos están proyectados para su lanzamiento entre finales de 2025 y mediados de 2026.
- Nuevos sistemas de cierre:
- Prototipos sin correa prometen reemplazar la hebilla tradicional, agilizando el uso sin comprometer la seguridad.
Un ejemplo destacado: el salto tecnológico de Shoei

Durante el EICMA de Milán, Shoei reveló el GT-Air 3 Smart, considerado uno de los cascos más avanzados en la actualidad. Entre sus características destacan:
- Proyector nano-OLED Full HD con datos como velocidad, rutas GPS y alertas en tiempo real.
- Mayor tiempo de reacción, reduciendo distracciones visuales en más del 30%, según sus desarrolladores.
- Intercomunicador universal, micrófono con cancelación de ruido y asistentes de voz integrados (Google AI y Siri).
- Certificación ECE 22.06 y calota AIM multicapa.
- Autonomía superior a 10 horas y un peso apenas superior a los 1,77 kg del modelo estándar.
Shoei prevé su lanzamiento para la segunda mitad de 2026, con un precio aproximado de 1.199 euros.
Otras marcas que impulsan el cambio
- Intelligent Cranium Helmets (ICH): Especialistas en visión 360° con IA.
- Zyon: Enfoque en salud y filtros ambientales.
- LIVALL: Reconocida por sus cascos inteligentes como el MC1, diseñados para movilidad urbana conectada.
Un futuro donde la seguridad será multisensorial
La integración de IA, sensores, cámaras y sistemas AR marca un punto de inflexión: los cascos inteligentes ya no solo protegen físicamente, sino que anticipan riesgos, reducen distracciones y optimizan la comunicación entre piloto y entorno.
El objetivo común de estas innovaciones es claro: hacer que la conducción en moto sea más segura, más conectada y menos vulnerable a imprevistos.
